martes, 17 de mayo de 2016

Experiencias religiosas

Hola!
Bueno, de este tipo de experiencias se podría hablar muchísimo, para gustos colores. Pero la mejor de todas, para mi, es andar en bus.
Y es que bus uno ve y escucha cada cosa... por ejemplo, montarse en un bus de Lomas es lo máximo! Eso de verdad es tapa del perol! De fijo la mayoría de usuarios son nuestros vecinos del norte, porque la mayoría tiene como residencia tan distinguido lugar. Entonces, uno va casi colgando, porque siempre van hasta la madre de gente, repellado sin compasión, y en medio de aquello, ve a una gorda gigantesca sacarse un teléfono celular diminuto del buche (puede ser que no sea tan diminuto, pero el buche es tan apoteósico que se percibe como así) O si por desgracia le toca ir disfrutando del sonido ambiente porque olvidó los audífonos en la casa, escucha las historias más increíbles. Por ejemplo, una vez iba una pareja sentada y yo guindando del pasa manos; el tipo iba muy concentrado en su pequeño celular no táctil cuando la mujer le ofrece un gran pedazo de pan, él muy serio replica que va ocupado analizando unos gráficos (wtf ese teléfono con costos prende) pero cuando por fin se desocupa de su labor, agarra el pan y empieza a decirle:
Él: " mira me tope a aquel hombre, el que trabaja de guarda allá, te acordas?"
Ella: " ay no! Y que pasó?"
El:"pues nada, yo le dije, oí te acordas de aquellas mujeres que pasaron por aquí el otro día?"
Ella: " te dije que no le dijeras nada!"
Él: "que me importa! Tenía que decírselo! Así que le dije, esas mujeres son mi doña y mi hija. Y si te volvés a meter con ellas te mato"
Ella: "ay pero te dije que no dijeras nada no ves que el carga arma siempre"
El: " ya te dije, a mi que me importa. Ya se lo dije. Lo hablado queda entendido"....
Ah! Puta frase célebre "lo hablado queda entendido" O como diría una amiga "el que es vivo agarra" La guarde en mi corazón para la posteridad.
Eso sin mencionar, el maje que vi un día cuando iba para el trabajo, feliz de la vida enrolando un purito de marihuana. O una pareja tomándose unas birritas y mientras él la llevaba abrazada y le tocaba una teta, me hacía ojitos.. Sin comentarios.
Me dio por hablar de esto pues cada cierto tiempo me toca acompañar a mi novio fuera del país para renovar la visa, y como la plata da pa tanto, humildemente vamos a David en lata. Entonces hay que empezar por ir a la parada de TRACOPA. Y eso es un calvario. Todavía no hemos luchado entender por qué putas no pueden vendernos asientos pegados, pero bueno. Este fin de semana tocó. De nuevo aquella rogada para que alguno de los dos hijos de su señora madre que nos tocó a la par quiera cambiar de asiento, ir habladas y finalmente hacerle ojitos al chofer para que no de permiso, aunque el bus vaya pelado.
Y como si eso no fuera suficiente, el sábado iba una doña tan pero tan tan tan cansona, que no se como diablos lo logró (estuve a punto de preguntarle qué celular tiene, porque la batería le duró eternamente) pero habló por teléfono desde que el pinche bus salió hasta que llegó a la frontera! O sea, seis horas completas de puros cuentos chingos! Seis!!! Eso definitivamente no es de Dios, porque si yo intentara oye música, en Quepos ya perdí la batería por completo.... De fijo.
Entonces, por fin llega uno a la dichosa frontera, que es como la antesala del infierno, se viene un aguacero insuperable, te empapas, y cuando por fin llegas al lado panameño ya dejó de llover y uno se quiere matar. El pelo parado, y no hay cepillo que logre arreglarlo, las patas empapadas y el culo cuadrado y el barco hundido... y para cerrar con broche de oro, los panameños te toman una foto... ingratitud total.
Pero el ride al final de cuentas es vacilon. Ir al centro de David se siente como estar en medio Chepe. Hay zonas personales en cada esquina, pero no hay ni un solo semáforo. Todos los taxistas te pitan cuando te pasan al lado, y casi todos llevan un chiqui chiqui a todo mecate que al rato ataranta. El que nos llevó de la terminal al hotel el sábado pasado pensó que era más adecuado escuchar Guns'n Roses porque mi novio tiene pinta de rockero.... Así que nos llevó escuchando Welcome to the jungle a voz en cuello y nos dio demasiada risa. Dato curioso: hay una barbería y un salón de belleza en la misma cuadra, en todas las cuadras.
Así que ya sabe. Si se monta en una lata, hagame el favor de poner atención a su alrededor, y verá que el viaje en vez de una tragedia, va a ser una completa y total experiencia religiosa! Ahí me cuenta!
Ah! Y no se le olvide! Viva feliz no se complique. Y su no puede, mediquese. Viera que bien se siente!