Últimamente se escucha por todas partes que uno debe enseñar a los niños, o talvez seria mejor decir, se debe dejar a los niños ser ellos mismos. Pero..... que putas es ser ellos mismos? Debo confesar que por intentar ser yo misma, lleve palo como una cabrona durante mi infancia. Todavía escucho la voz de Sor Flora Abarca que nunca se canso de decirme: controle ese carácter, contrólese, contrólese... Pobre mujer, la admiro por insistente.
Pero a pesar del esfuerzo de la monja, del sacrificio y las lagrimas de mi madre, y los contundentes fajazos de mi papa, heme aquí. Sigo siendo la misma de hace tantos años atrás. Lo único que tal vez podría decir a mi favor, es que con el paso del tiempo aprendí a que no siempre seria valorada a respetada si decía lo que pensaba con todas las letras. Y así, cada año que ha pasado, me ha dejado una nieva gran lección. Eso si, a pesar de las amenazas de despido, a pesar de las suspensiones y llamadas de atención, confieso que aun conservo a la honesta que llevo por dentro.
No ha sido fácil dejar morir mi yo interior. La verdad es que ignorarlo, de hecho, me parece hasta cruel. Por que? No se supone que uno debe ser honesto, decir lo que piensa, y defender fieramente sus creencias? El problema es que a NADIE le gusta que le digan las verdades de frente. Y quien lo hace es siempre tachado de rebelde, mal criado y hasta irreverente. Pero yo creo fielmente que todo depende del tono en el uno lo haga y la forma en que el otro lo reciba.
Entonces, por ejemplo. Cada uno tiene el santo derecho a decidir cual ideología seguir. Y no por eso debería ser señalado, o si? Pues bien, recientemente una persona muy querida, izquierdista de pura sepa, a quien he admirado y respetado por años de años, decidió borrarme de su lista de amigos de Facebook porque no le gusto que no me doliera la muerte de Fidel Castro, y lo hiciera publico en mi muro (con chistes y memes incluidos). Me dolió, porque se supone que no importa en que creamos o que pensemos, la amistad debe prevalecer ante todo, en este caso en particular, obviamente no aplicó. Penoso.
Por otro lado a nivel personal, es una embarrada. Si le decís a tu pareja, parientes, amigo o relativos, exactamente lo que pensás, de fijo te comes un pedo enorme.Por el simple hecho de que a nadie le va a gustar que seas honesto. Y es aquí donde recuerdo vagamente cuando hace mucho tiempo atrás tuve un distanciamiento temporal con mi mejor amiga, porque ella se enojó cuando le dije lo que pensaba con respecto a un tema en particular, y prefirió enojarse conmigo porque yo no estaba de acuerdo con ella y su forma de ver el asunto.... O sea....
